¡Ámsterdam con curiosidad!

No saber nada sobre un lugar. El solo escucharlo por la televisión y el oír a gente que habla cosas muy por encima sobre cada uno de los lugares que visita. El admirar cada foto que aparece en nuestro buscador y el leer siempre artículos y noticias sobre ciudades que me encantaría visitar.

¿Por qué no informarme antes de visitar ese lugar y sentirme como una persona más dentro de esa forma de vida y de esa mentalidad?  Esto lo pensé en el momento que una tarde tomando un café con unos amigos me dijeron que querían ir Ámsterdam y que nos reuniéramos todos para organizar una escapadita de un par de días.

¡Ámsterdam con curiosidad!
¡Ámsterdam con curiosidad!

Tampoco muchos, porque la economía no está para dar tantos saltos, pero sí, pero si durante todo el año se trabaja y mucho por qué no permitirte de vez en cuando un pequeño capricho.

Buscando información

Bien, pues empecé a buscar información sobre la ciudad y encontré cosas verdaderamente interesantes y algunas de ellas muy graciosas.

Hacia el siglo XIII Ámsterdam era un pueblo de pescadores. Según cuentan las leyendas, la ciudad fue fundada por dos pescadores de la provincia norteña de Frisia, que por casualidades de la vida acabaron en las orillas del río Amstel en un barquito, junto a su perro.

Muchos saben que en el siglo XVI comenzó el conflicto entre los neerlandeses y Felipe II de España, pero fue en el siglo XVII cuando la ciudad alcanzó su mayor hervor. En ésta época se considera estar viviendo en el Siglo de Oro de Ámsterdam: la ciudad se convertiría en una de las más ricas del mundo.

La Venecia del Norte (otra, sí)

Bien, pues introducida un poco de su historia ya me empezaban a entrar cada vez más ganas de visitar la ciudad. Es una ciudad que quienes la han visitado alguna vez dicen que la mejor manera para recorrer la ciudad es en barco. Tiene multitud de canales y el primer barco por el canal fue para recibir a la Reina Isabel en el año 1621.

En unas horas nos dirigimos hacia Ámsterdam. Estoy contenta. Emocionada. Con ganas de que la ciudad me enseñe sus encantos y con ilusión de encontrarme con una ciudad llena de energía. Ver cosas diferentes y aprender como viven ahora si lo comparamos con el ayer.

He podido leer muchas cosas sobre esta ciudad y espero que sea tal y como he podido ver. Ahora nadie más tendrá que contarme qué tal ha ido su viaje por los Países Bajos. Podré daros mi opinión en breve.