Escápate un fin de semana este verano

Este verano puedes hacer varias cosas, escaparte un fin de semana si no tienes mucho presupuesto o pegarte la vida padre si lo tienes y salir todos los fines de semana posibles. Sea como fuere el verano es una de las mejores épocas del año por no decir la mejor para disfrutar del buen tiempo y perderse por el mundo.

España es un lugar tan bueno como cualquier otro para viajar por lo que si no queremos gastar mucho podemos escaparnos a otras ciudades del país y disfrutar del clima ya sea en la montaña o en la calurosa playa, la decisión es nuestra. Continuar leyendo «Escápate un fin de semana este verano»

Ver junglas y casquetes polares a la vez

Vamos a ser sinceros: cuando nos  preguntaban, de pequeñitos, a qué queríamos dedicarnos cuando creciéramos, todos hemos dicho en una u otra ocasión que nos gustaría ser astronautas. Luego, la vida se ha encargado de que cada cual viviera o dejara de vivir ese sueño de formas diferentes. Ahora, podemos volver a soñar.

No es que me falten destinos de los que hablar sobre el planeta –creo que eso siempre voy a estar “sobrado”-, sino que no me portaría verlos todos a la vez, al menos en una ocasión en la vida. Es por eso que se me ha ocurrido informarme sobre los viajes turísticos al espacio. De acuerdo: están muy lejos del alcance de mi cuenta bancaria, pero también lo estaba, hace sólo diez años, un ordenador como el que estoy utilizando ahora mismo para escribir.

Earth

Lo primero que se necesita para un viaje suborbital, a cien kilómetros de altura, es un entrenamiento intensivo de dos días, incluido en el precio de la experiencia. No sólo es una fase imprescindible, sino que va a enriquecer enormemente la aventura.

Una experiencia enriquecedora

Durante la rutina, nos vamos a familiarizar con el programa de vuelo, los sistemas críticos de la nave, operaciones de vuelo, nos acostumbraremos a la gravedad de cero, las aceleraciones en vuelo y los procedimientos de seguridad en lo que a vuelos espaciales se refiere. Además, el día del lanzamiento nos acompañará una tripulación especializada hasta que abordemos la nave.

Los motores de la nave nos llevarán por encima de los límites habituales de vuelo, hasta alcanzar los cien kilómetros de altitud. Allí, experimentaremos cinco minutos de ingravidez y podremos contemplar la curvatura de la Tierra o la negrura del espacio exterior, para regresar de nuevo a la posición inicial y comenzar el descenso a la Tierra, donde recibiremos la condecoración y la documentación formal que acredita nuestro vuelo.

Caro e inolvidable

Space Adventures es la empresa encargada de llevarnos al espacio, en un vuelo que, aun sin abandonar la órbita terrestre, dejará una huella imborrable en nuestra memoria. El vehículo está diseñado para ascender, suspenderse y descender automáticamente, sin necesidad de piloto alguno.

El precio de la aventura es de 120.000 dólares –sobre 91.000 euros-. De acuerdo: no es una cantidad que todo el mundo pueda permitirse por dos noches de hotel, un entrenamiento y una misión espacial, pero sí que significa que el sueño infantil de convertirnos en astronautas está un poco menos lejos.

Tal vez, dentro de una o dos décadas…

Reviviendo leyendas

La pasión por los viajes no siempre lo es por el sitio físico al que llegamos. A ver: me explico –o lo intento, que no va a ser fácil-: está muy bien llegar a, digamos, León, y disfrutar de su catedral (podría quedarme horas embobado con el juego de luces que proyectan las cristaleras o pasarme unas cuantas tardes –y noches- en el Barrio Húmedo, por ejemplo. Pero sería un viaje incompleto.

No habría disfrutado igual si no supiera de la Leyenda del Topo de la Catedral. Estoy convencido de que las cervezas del “Húmedo” (su nombre viene por otro lado, no por el zumo de cebada: investigue, que es curioso) no me sabrían igual si no supiera de las dificultades para levantar el templo y de que los canteros se excusaban en un supuesto topo gigante que destruía por la noche los cimientos que asentaban por día.

Reviviendo leyendas

Como no es el objetivo de este artículo contar leyenda alguna –más adelante, tal vez-, dejamos aparte al topo-quelonio de la Puerta de San Juan. La idea de este escrito es invitar a que hagamos una forma de turismo que no sabría decir si es nueva, pero sí poco habitual.

Un safari de leyendas

La propuesta es que cacemos leyendas. Pero no que las matemos, algo que sería muy fácil en muchos casos con los conocimientos científicos e históricos a los que todos tenemos acceso. La propuesta es que cambiemos, para este safari, el rifle por la cámara, ambos, al menos en principio, metafóricos.

Lo que sugiero es que vayamos tras los pasos de aquellos lugares donde la historia se esconde detrás de la leyenda, o a la inversa, no sabría decirlo. Que lleguemos y nos empapemos de lo que ocurrió o dicen que ocurrió.

Vayamos, seamos, vivamos

Cacemos  al topo en equipo con los fantasmas de los canteros leonenes, sintámonos druidas en Stonehenge, besemos la piedra de Blarney, compartamos celda con Cervantes en Argamasilla de Alba, sintamos el terror de la noche en el monte de las Ánimas, combatamos junto al Cid en Consuegra y ayudemos a atar su cuerpo inerte al caballo, o disfrutemos de un paseo con Lázaro a la diestra y La Celestina a la siniestra a orillas de Tormes…

… Vayamos tras las leyendas, vivámoslas en nuestra imaginación, pues fue la imaginación y la palabra la que las creó y ha de ser nuestra alma quien las reviva. Un alma que no entiende de lugares físicos. Por eso, una ciudad, una cueva, un templo o una cárcel no son sino el mero marco donde lo que de verdad importa sucedió… O no…

La carretera madre

Lo de este país es curioso: fuera de él, es admirado y denostado a partes iguales. Tanto de habla lamentablemente de él como se desea visitarlo e incluso quedarse a vivir allí. Pero algo común a sus habitantes es el orgullo de ser estadounidense.

Si de verdad que queremos conocer Estados Unidos, reservemos unos días y alquilemos un coche. Uno grande, potente, cómodo y fiable. Y tomemos lo que los propios estadounidenses llaman la “Calle principal de América”, la Ruta 66.

La carretera madre

Ésta fue la carretera que seguían los emigrantes que pretendían alcanzar el Oeste, sobre todo a lo largo de la década de los 30. Con el paso del tiempo y la construcción de la red de autopistas, la “Mother Road” ha caído en desuso. Pero conserva el encanto romántico del viaje hacia un futuro más próspero.

Restos de lo que fue: arqueología con ochenta años

A pesar de que muchos de sus tramos se encuentran cerrados (no es de sentido común atravesar, por ejemplo, un puente que lleva décadas sin someterse al correspondiente mantenimiento), son también muchos los lugares que nacieron a la vera de la carretera y al calor del comercio que se generaba por los millones de personas que la recorrían.

A día de hoy, podemos disfrutar de buena parte del encanto de esos pueblos, no ya como si fueran hospitales de una mísera peregrinación en busca de sustento, sino como restos de una arqueología demasiado moderna para serlo y lo bastante antigua y en desuso como ser cualquier otra cosa.

Casi cuatro mil kilómetros

Merced a la Route 66 pasaremos por Illinois, Misuri, Kansas, Oklahoma, Texas, Nuevo Mexico, Arizona y California. Casi cuatro mil kilómetros que no siempre se conocen, lejos en su mayoría de las playas Californianas o de los rascacielos neoyorkinos.

Conoceremos Estados Unidos desde otro punto de vista: el que no sale en el cine y al que le importan un bledo las cuitas de Brandon y Brenda o como quiera que se llamen los protagonistas del último romance entre niños ricos y desocupados, siempre y cuando el grano salga adelante y el buey se críe sano.

Y sí: también reconoceremos algunos de los parajes, si es lo que vamos buscando: puentes pueblos, paisajes especulares y tipis jalonan la carretera. Un camino lleno de cultura americana y, por lo mismo, internacional, que ha inspirado, además, todo tipo manifestaciones culturales que serían inconcebibles si no existiera el camino. Sólo dos ejemplos de entre miles: la canción interpretada por Nat King Cole “(Get your Kicks on) Route 66” y el imprescindible Las uvas de la ira de J. Steinbeck.

Las Catedrales Góticas, sus enigmas y misterios

Se estima que las primeras catedrales, abadías, monasterios y basílicas, etc., (como las conocemos actualmente) emergieron por Europa hacia los siglos XI y XII, cuando la extraordinaria actividad constructiva reflejó tanto la cultura religiosa como el poderío de la nación donde estaba.

La mayoría de los países cristianos rivalizaban entre sí por tener los edificios más grandes y bellos y el denominador común era Dios y la Guerra, sin contar lo que demostraban económicamente, aunque algunos de estos países casi estaban en bancarrota.

St Michaels Cathedral

La mayoría de las catedrales tienen una arquitectura amplia, exageradamente decorada y si la vemos al detalle un poco siniestra, tanto es así que muchas de ellas en lo más alto de sus tejados tienen gárgolas.

¡Pero qué bichos más feos!

¿Qué hacen un grupo de gárgolas en el tejado de una catedral gótica cristiana? Pues esto se lo debemos a los artistas medievales, que no solo creían en Dios de manera fehaciente, sino que también creían en demonios, brujas y muchos mitos ancestrales. Las gárgolas ahuyentaban a todo ser maligno que quisiera entrar en la casa de Dios, pero también eran desagües para los tejados.

Masas controladas

Pero no solo las gárgolas son uno de los misterios y enigmas que pululan por las catedrales góticas, la mayoría de los constructores de aquella época plasmaban en piedra tanto en el interior como en el exterior, secretos y conocimientos astronómicos, físicos y alquímicos, símbolos religiosos pero también esotéricos y místicos e incluso criaturas fantásticas salidas de unas mentes posiblemente demasiado calenturientas.

El hecho de que las bóvedas sean tan amplias y altas era una simple estrategia casi de control mental: cuando se celebraba alguna misa, al unir los cánticos y la luz procedente del exterior ejercían un control casi hipnótico en los fieles, grabándoles temor y obediencia a Dios.

El secreto estaba en el ambiente

Sus vitrales y sus rosetones, que fueron una de las finalidades de los maestros vidrieros que siguieron el nuevo pensamiento e innovación técnica y arquitectónica de la época, produjeran un ambiente especial y místico ya que la mayoría de las vidrieras multicolores tienen motivos bíblicos, su influencia para los fieles de aquella época fue tal que se sentían cerca de la gloria celestial.

Muchos historiadores afirman que estas obras tan magnificas fueron hechas por constructores masones, teniendo su origen en la orden de los caballeros templarios, ya que estos aportaron una sustancial suma económica para sus construcciones.

La verdad es que las catedrales son joyas arquitectónicas, son hermosas y te hacen pasear por una Historia muy antigua.  No importa los misterios y enigmas que puedan tener, que seguro tendrán, lo importante es el legado que nos dejaron aquellos hombres que tenían una hermosa idea y la supieron plasmar.

Se abre aquí una ruta, la de las catedrales y construcciones religiosas que, con tiempo, iremos siguiendo.

¿Qué implica el “last minute” para los hoteles?

Con expectativas crecientes gracias a las aplicaciones móviles para reservar habitación vía “last minute”, los hoteles deben tener en cuenta qué implica este tipo de ofertas. La promesa de reducir el número de habitaciones vacías a través de la reserva de última hora no es nada nuevo

En Europa los viajes de último minuto son algo habitual, debido a la proximidad de destinos relativamente baratos. Este hecho ha animado a muchos clientes a despreocuparse un tanto de planificar sus vacaciones por anticipado a cambio de unos precios más bajos.

Mientras que la industria de los packs vacacionales es lo bastante flexible para ofrecer paquetes a diferentes precios, los hoteles individuales poseen una capacidad limitada a unos precios relativamente fijos. Son estas pequeñas empresas las que pueden sufrir alguna consecuencias no deseadas del last minute: las molestias a los clientes habituales, el recorte en las tarifas o el acostumbrar al cliente potencial a esperar al último minuto.

Para muestra, un botón

El ejemplo claro, real, proviene de un hotel de Nueva York que se volcó en potentes ofertas de último minuto. Los clientes habituales no tardaron demasiado en enterarse de las tarifas, de modo que, lógicamente, cancelaban las reservas y re-reservaban o esperaban hasta el último momento para ver cuánto les costaría en el mismo y en otros hoteles de la ciudad.

La aplicación para móviles “HotelTonight” se ha descargado sobre tres millones de veces y es con toda probabilidad la principal responsable en el cambio de la forma de reservar hoteles de muchos viajeros: quienes asisten a conferencias cambian cada noche de hotel, buscando la mejor oferta; los viajeros avezados de negocios esperan a reservar su hotel hasta que llegan a su destino…

El móvil, vehículo del cambio

Con todo, la potencial captura de clientes pesa más en los empresarios que la posibilidad de acostumbrar a quienes pernoctan en sus locales a buscar sólo las ofertas de última hora. El responsable de “HotelTonight”, Jared Simon explica, en una declaraciones publicadas por tnooz.com que no hay duda de que el móvil se está convirtiendo en la manera principal de reservar alojamiento.

Como decimos, estas ofertas son más efectivas para las grandes cadenas, mucho más flexibles en cuanto a ofertas y precios. No así para los hoteles más modestos, que han de hacer un esfuerzo de cálculo (y de secretismo, incluso) para que los gastos fijos por habitación –personal, útiles, etcétera, no rebasen los ingresos que esta misma les deja.

Andorra, paraíso natural (I)

Esta propuesta va para aquellos a los que la montaña les inspira, les relaja, les fascina. Existen personas a las que la naturaleza les hace sentir vivos, les hace sentir que son tan libres como los pájaros. Por eso, la mayoría de ellos eligen un destino vacacional donde la montaña y la naturaleza sean su principal escenario.

En este caso, Andorra ofrece a sus visitantes el contacto con la naturaleza, el aire puro de sus montañas, la grandiosidad de un escenario de película. En invierno, las estaciones de esquí están abarrotadas de gente aficionada a este deporte, en verano, se acercan gentes que huyen de las playas a rebosar de gente y el calor del sur.

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Lugares con nombres que evocan leyendas

Existen pueblos y lugares en España cuyos nombres hacen volar la imaginación con tan solo escucharlos. Nombres que nos hacen pensar en cual sería el origen y quién y por qué habrá bautizado de esa forma a una población en concreto.

Esto son dos lugares que me han llamado la atención y la leyenda que esconden. En la mayoría de los casos historia e imaginación se cruzan y es difícil saber qué parte hay de verdad y qué parte corresponde a cuentos que se han ido transmitiendo, pero ¿a quién le importa la realidad cuándo hay una bonita leyenda?

Aldea del Rey Niño

Está situada en la provincia de Ávila y su origen se remonta a la época de los romanos. Cuenta la leyenda que en el siglo XI,  Doña Urraca, viuda y madre de un hijo, sube al trono de León tras la muerte de su hermano. Convertida en heredera es obligada a contraer matrimonio nuevamente. Pero pronto descubre que su nuevo esposo quiere matar a su hijo para hacerse con el trono. Un grupo de nobles que conocían los planes del noble, se llevan al joven Alfonso y lo van escondiendo por diversos lugares para evitar que sea asesinado.

Uno de estos sitios resulta ser el Palacio de la Serna, a un kilómetro de esta aldea. Se dice que el joven rey paseaba por el pueblo como un aldeano más para evitar ser reconocido. Finalmente el joven se salvaría y subiría al trono como Fernando VII de León.

Cerro de La Encantada en Santa Cruz de la Zarza (Toledo)

La leyenda de La Encantada se repite en múltiples lugares de España y podemos encontrar muchos sitios que hacen referencia a esta historia. En cada zona se cuenta de diferentes formas, pero la base siempre es la misma. Incluso en los lugares dónde han estado los árabes, existe la leyenda de La Mora Encantada, que es una versión adaptada de la anterior.

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Todas las leyendas de La Encantada hablan sobre una mujer que se aparece la noche de San Juan y que peina sus cabellos mientras se refleja en un espejo. En este caso una de las más populares en Santa Cruz, pues existen varias versiones, habla de Juliana, la hija de un noble que se iba a desposar. En la víspera de San Juan esperaba impaciente a su amado temiendo que le hubiera pasado algo debido al mal tiempo, cuándo una gitana con un bebé en sus brazos llamó a la puerta para pedir que le dejaran refugiarse.

La mujer, enfadada y nerviosa por no saber de su prometido, no le permite entrar y la echa con malos modos, por lo que ella la maldice diciendo que el castillo será destruido y ella desaparecerá durante todo el año, pudiendo tan solo mostrarse la víspera de San Juan.

El mal tiempo se transforma en tormenta y un rayo destruye el castillo. El caballo del hombre al que esperaba aparece solo y pronto descubren que ha muerto despeñado. Juliana se vuelve loca tras eso y se cuenta que su imagen sigue apareciendo, esperando ver llegar a su enamorado todas las vísperas de San Juan, en el mismo cerro dónde se levantó un día su castillo.

Retiros para desconectar

Con la vida que llevamos, en que el estrés es una de las principales lacras cotidianas de hoy en día, por el ajetreo, el trabajo, la vida social, la vida familiar, la crisis, y demás anomalías de nuestro tiempo, tenemos y buscamos cubrir la necesidad de expandir nuestra mente y nuestras ideas a sueños que nos gustaría realizar y que por ese estrés lo vemos imposible.

A veces tenemos la necesidad imperiosa de desaparecer de todo lo que nos rodea y alejarnos lo más lejos posible, ¡Sabes! Puedes hacerlo, y te explico cómo.

Los retiros espirituales son más de lo que pensamos, no importa que religión tengas, (si la tienes) lo único que necesitas es estar solo o sola contigo mismo/a, estar en la tranquilidad de tu ser y poder ver con más claridad todo lo que te rodea o te ha rodeado.

Hay centros especializados en que no sólo hay retiros espirituales, también hay retiros de yoga, turismos de salud, centros espirituales, turismo holístico (es un centro que acoge a huéspedes con el propósito de que experimenten vivencias en que les reporten beneficios en cuerpo, mente y espíritu), etc., y que te proporcionaran el descanso principalmente mental que posiblemente necesites.

En cualquiera de estos retiros o centros su misión principal es que puedas realizar actividades creativas, actividades físicas y actividades mentales y que puedas recrearte en todas ellas como partes de ti y explorar las facultades que posiblemente no te hayas percatado de que tengas.

Dónde ir

Hay varias opciones, si se desea este tipo de escapada, pondremos varios ejemplos:

Los Monasterios, estos suelen estar ubicados en lugares de paz, serenos y con la naturaleza como compañía, sus construcciones pueden ser variadas, pueden estar cerca de un lago, un bosque, etc., pero siempre con mucha paz.  Si te interesa averigua la duración de su internación, los programas que pueden tener, ubicación, alojamientos, comidas, etc.

Centros de yoga, estos se pueden localizar en pequeños pueblos, alrededor de grandes ciudades, donde la naturaleza también reina, aquí te podrán ayudar a la meditación y a la relajación; a conectar tu cuerpo, tu mente y tu espíritu en uno solo, si te interesa averigua las opciones que más te puedan interesar como ubicación, alojamientos, programas, comidas, sesiones, etc.

Turismo holístico, estos centros se encargan que estés en un recinto de paz y armonía para que tu beneficio físico y mental esté en armonía con todo lo que te pueda rodear, si te interesa averigua sus programas de actividades y sesiones, precios de estancia, etc.

Hay un mundo que te espera fuera de esa vida que te abruma, piénsalo bien y decide, posiblemente esta puede ser la respuesta que buscabas.

Escapada a Japón: Descubre qué hacer

Japón es un destino muy interesante, no sólo por su cultura y patrimonio monumental sino también por su gran avance tecnológico, pues ¿quién no ha soñado alguna vez con dar un paseo en el tren bala? Por eso, si estás pensando en visitar Japón, ya sea con motivo de un viaje de novios o por el simple hecho de hacerte una escapada al país nipón, te damos algunas ideas sobre las actividades que puedes realizar en este atractivo destino.
Si eres un aficionado a la práctica de escalada, entonces qué mejor que escalar el Monte Fuji, la montaña más popular y elevada de Japón, desde donde es posible contemplar estupendas vistas. Claro que, para ello, debes programar tu viaje entre los meses de julio y agosto, durante la temporada oficial para escalar, que es cuando el clima es más templado y no hay nieve en el monte. También, puedes optar por concurrir durante la semana de Obon, a mediados de agosto, cuando alpinistas provenientes de todas partes del mundo se hacen cita aquí para escalar este gigante.
Otra opción es disfrutar de los baños termales en los onsen. Si bien hay casi 3.000 de ellos diseminados por todo Japón, uno de los más populares es el Onsen de Kusatu, situado a unos 150 km de Tokio. Los hay tanto al borde del mar como en el interior de las montañas, aunque también suelen encontrarse dentro de algún edificio, y en su mayoría no son mixtos.
Aquellos que prefieran esquiar, pueden practicar este deporte en las áreas de Tohoku, Hakuba o Hokkaido, a comienzos del mes de diciembre.
Ir de compras es una de las actividades que nadie quiere perderse, sobre todo porque se trata de un país que estructura su vida en torno a la fabricación de bienes de consumo. De hecho, visitar los grandes almacenes de las ciudades más importantes del país puede considerarse una actividad relajante. Se pueden comprar desde productos electrónicos, artesanías confeccionadas en bambú, relojes, kimonos, lámparas de papel, abanicos, entre muchas otras cosas. Uno de los mejores lugares para ir de compras es Ginza, considerada la versión nipona de la quinta avenida neoyorquina, es la zona más cara y exclusiva de todo el país.
También, pueden visitarse los «Nomi-no-ichi«, una especie de mercadillos que se alzan en distintas partes de Japón, gran parte de los cuales se sitúan en el recinto de los santuarios y templos.  Aquí se venden una gran variedad de artículos nuevos y de segunda mano, como por ejemplo antigüedades, platos y ropa vieja, de distintos precios y estilos. Entre los más conocidos se encuentran el Togo-no-Mori Nomi-no-ichi, ubicado en el santuario Togo y el Aoyama Oval Plaza Aozora Kotto-Ichi, situado en la Plaza Oval de Aoyama, ambos en Tokio.
Por supuesto que cualquiera que visite Japón no puede perderse la experiencia de viajar en el famosísimo shinkansen súper exprés o tren bala, que alcanza una velocidad de 270km/h. Si deseas que el paseo sea un poco más económico, antes de viajar a este país puedes adquirir tu «rail pass».
Los amantes de la tecnología, seguramente no podrán resistir la tentación de ir a Akihabara, catalogada como la urbe eléctrica de Tokio, donde pueden comprarse los productos eléctricos más económicos de todo el mundo sin tener que pagar el impuesto aduanal, con sólo presentar el pasaporte con el correspondiente visado.
Salir a comer sushi es otro de los clásicos para los turistas. Y aquellos a quienes no les guste al pescado crudo, pueden optar por probar otros platillos típicos de la cocina japonesa, como el  Yakitori, kebabs de pollo en barbacoa, Udon y Soba, fideos japoneses, y Tendon, arroz con camarones fritos, entre tantos otros. Para pasar una velada especial, están los restaurantes tradicionales donde la comida es servida por mujeres en kimonos.