Aquí estoy, de nuevo, dispuesta a levantar la alfombra de la zona turística de Cancún para enseñarte la llave de la puerta de algunos paraísos poco conocidos y también la basurilla que han barrido para esconderla debajo.
Como os comenté, la sobreexplotación está destruyendo los ecosistemas que rodean Cancún y no parece que deseen pararlo del todo. Una de las zonas que más lo está acusando es el sistema lagunar Nichupté que tiene algunas zonas seriamente contaminadas por lo que despide un olor fétido y nauseabundo debido a la putrefacción de las plantas y al vertido ilegal de algunos hoteles y centros comerciales que conectaban sus conductos de evacuación de aguas fecales a los de aguas de lluvia.
Además, como más del 80% del suelo está pavimentado, el agua no penetra en la tierra y arrastra la suciedad, productos químicos y metales pesados a la laguna.
No os quiero desanimar, poco a poco se van recuperando algunas zonas que habían sufrido un deterioro terrible. Desde el 2008 varias entidades emprendieron un proyecto de reforestación y protección de los manglares de Nichupté, con el objetivo de conservar y restaurar el ecosistema, por ello hay zonas muy hermosas que os recomiendo que visitéis.
Sistema lagunar de Nichupté
Nichupté es, en realidad, un sistema lagunar de más de tres mil hectáreas comunicado con el mar Caribe por dos canales, el Sigfrido y el Nizuc y compuesto por siete cuerpos de agua entre los que destacan la Laguna Bojórquez, la Laguneta del Mediterráneo y la Laguna del Amor.
Hay empresas que ofrecen visitas guiadas por los manglares, Área Natural Protegida por el gobierno mexicano en la actualidad, en los que viven hermosas especies animales y vegetales como el mangle rojo, el botoncillo, cocodrilos, ranas leopardo, iguanas, aves migratorias y tortugas blancas entre otras, y que puedes observar si contratas un recorrido turístico en barco. Algunos atraviesan los manglares y te llevan a los arrecifes de Isla Mujeres, en los que se puede bucear y hacer esnórquel.
En la laguna también se pueden practicar otras actividades como la pesca, el kayak, el esquí acuático y las motos de agua, así como visitar el malecón turístico para hacer fotografías de la puesta de sol sobre la laguna.
Isla Mujeres
Es una islita pequeña de apenas ocho kilómetros de largo y cuatro de ancho, pero muy bonita de ver ya que tiene playas preciosas, restos arqueológicos mayas y una historia muy interesante. Fue santuario de Ixchel , la diosa maya de la fertilidad, y la isla todavía conserva una pequeña zona arqueológica recuerdo de aquellos tiempos en la parte sur.
También fue refugio de tratantes de esclavos y de piratas lo que da mucho morbo porque una no puede dejar de fantasear con la idea de que a lo mejor hay escondido un tesoro en alguna de sus cuevas.
No sé si tesoros piratas, pero tesoros naturales sí esconde en su seno. De hecho se hizo mundialmente famosa en la década de los 70 cuando el oceanógrafo Ramón Bravo enseñó al mundo la Cueva de los Tiburones Dormidos.
Los amantes de la naturaleza tienen que realizar una visita obligada al santuario de las tortugas: seguro que lo has visto alguna vez en un documental: de mayo a septiembre miles de tortugas gigantes llegan a la isla para desovar y entierran los huevos en la arena. Un buen día, los huevos eclosionan y salen las crías de la arena iniciando una carrera a vida o muerte ya que las aves marinas acechan.
Desgraciadamente están en peligro de extinción y no precisamente por las aves, sino por los cazadores furtivos que luego venden su carne y caparazón, así que esta zona está protegida y los huevos se llevan a un acuario para asegurar que nazcan en perfectas condiciones y luego llevarlas al mar.
Isla Mujeres es un paraíso para los amantes de las actividades acuáticas ya que se puede practicar esnórquel, snuba, kayak, bucear y, claro está, chapotear cerca de sus preciosas playas de fina arena y tumbarse bajo un cocotero.
Lo malo es que están sobreexplotándola como Cancún y en su pequeña superficie hay 29 hoteles y numerosos restaurantes y locales de ocio, así que si bien es tranquila, ya no es el paraíso en la tierra que era hace unos años. No obstante eso también es una ventaja si quieres quedarte un par de días a descansar, ya que cuenta con todas las comodidades necesarias, aunque te advierto que los precios son un poco caros ya que se está convirtiendo en isla de lujo.
No deberías perdértela; ni tampoco Isla Contoy, santuario de aves que se encuentra apenas a 45 minutos; las visitas se realizan con un número limitado de personas así que tienes que reservar con antelación.
Espero que te hayan gustado estas propuestas: ¡nos vemos en la siguiente entrega!