Ahora que ha pasado el puente del primero de mayo, en el que seguro muchos de nosotros hemos aprovechado para hacer esa escapadita que nos apetecía hacer desde hace un tiempo, es hora de empezar a pensar en nuestro próximo destino durante nuestra próxima escapada de fin de semana.

Aunque han pasado pocos días desde el puente, esta semana hay marcada en nuestro calendario una gran cita que no nos podemos perder: la Feria de Abril de Sevilla. Bueno, vale, quizá este año no es feria de abril por problemas con el calendario, pero seguro que os morís de ganas por daros un capricho e ir a disfrutar de esta gran fiesta de Interés Turístico Internacional.

Alumbrado, lunes de pescaíto, rebujitos… y mucha diversión

La Feria de Sevilla se inicia de manera oficial con el tradicional alumbrado de la portada de la feria y de todas las luces del Real, que se produce durante la media noche del lunes y que da paso a la primera gran noche de fiesta con el lunes de pescaíto.

FERIA-DE-ABRIL-2014

Por delante tendremos una semana de pura diversión en la que las sevillanas, la buena comida como el jamón y el pescado, o los vinos finos y el rebujito se mezclan para dar tanto a los sevillanos como a los millones de turistas que visitan la ciudad durante la semana de feria todo lo mejor y el máximo potencial posible puesto en marcha.

Pero no pensemos que el origen de esta feria data de unos pocos años, porque nada más lejos de la realidad. Lo cierto es que ya se han celebrado más de 120 ediciones de una de las citas más importantes en la agenda sevillana, andaluza y mundial.

La fama de la feria de Abril viene dada por múltiples motivos entre los que se encuentran su gran número de casetas, ya que cuenta con más de mil casetas repartidas por todo el Real, así como de atracciones, al contar en cada edición con más de 400 atracciones para el disfrute de pequeños y mayores.

Por si fuera poco podemos disfrutar de un hermoso paseo a caballo o en carruaje y de los mejores vestidos de flamenca en cada uno de los rincones de esta feria. Porque si hay algo en lo que los sevillanos no escatiman en gastos es en su feria y no dudan en comprar grandes vestidos para cada uno de los días que asistan a ella.