Clunia, nuestra Roma particular (II)

En este post seguimos contándoos particularidades de Clunia. Hasta ahora hemos visitado su teatro, su foro, sus baños y sus necrópolis.

Ahora vamos a hablar de sus casas y de las lagunas subterráneas que usaban para abastecerse de agua.

Os recordamos que su ubicación está en la planicie del Alto de Casto, perteneciente al pueblo burgalés de Peñalba de Castro.

 

Las casa romanas

Habitualmente eran de una sola planta. Las habitaciones se estructuraban alrededor de un patio central que contaba con un impluvium destinado a recoger el agua de la lluvia.

La organización de la privacidad iba de lo público a lo privado, siendo las primeras habitaciones donde se recibían a los invitados. Unos pasillos porticados llevaban a las habitaciones interiores de la vivienda, la zona más privada de la casa.

Variedad de ambientes

Al ser Clunia una ciudad tan grande, presenta la amplia variedad de viviendas destinadas a todas la clases sociales romanas.

Dependiendo de la riqueza de los visitantes, las casas romanas contaban con decoración en paredes y suelo a base de mosaicos y patios ajardinados.

Calefacción central

También contaban con habitaciones subterráneas que les protegían contra el frío y el calor. Incluso algunas viviendas contaban con un sistema de calefacción a base de vapor de agua.

Como nuestra calefacción central, tenían un depósito de agua que calentaban y con cuyo vapor conseguían calentar las habitaciones. Este vapor de agua se distribuía por las dobles paredes con las que estaban hechas las habitaciones y que se comunicaban con la caldera central.

Cueva Román

La ubicación de la ciudad de Clunia no es casual, responde a una decisión meditada, tal y como corresponde al modo de construcción romano. Está situada no sólo en una planicie inmensa en la que se puede ubicar una gran ciudad y defenderla fácilmente, sino que descansa sobre una gran reserva de agua.

La Cueva Román es un conjunto de lagunas y galerías subterráneas cuyas aguas brotan en los numerosos manantiales que hay en las laderas del cerro.

Este acuífero subterráneo fue explotado a través de pozos. El trabajo de infraestructura es reconocible en los canales de interconexión entre lagunas, así como las numerosas inscripciones en su interior que lo atestiguan.

Sin necesidad de acueducto que lleve el agua hasta la ciudad, Clunia podía resistir un asedio sin problemas de agua ya que los magistrados que la gobernaban cuidaban del mantenimiento de las conducciones.

El santuario

En la cueva podemos encontrar una pequeña cavidad con un conjunto de figuras itifálicas y máscaras. Están hechas con barro de las mismas cuevas y algunas tienen inscripciones.

Los estudiosos consideran que es un espacio de gran simbolismo cuyo carácter puede ser sagrado o mágico. Lo identifican con el culto a Príapo y debido a las inscripciones se puede ver que lo visitaban ciudadanos importantes de Clunia.