¡Ayyyy Bandolero!

Después de tantos días de fiesta tras la Semana Santa, creo que tengo la cabeza como una cabra. Y ya sabéis que la cabra tira al monte y cada vez que pienso en montes me viene la canción de la serie de Curro Jiménez.

Así que pienso dedicar el blog de hoy al personaje en quien basaron parte de la serie televisiva, José María Pelagio Hinojosa Corbacho, un bandolero cordobés conocido como “El Tempranillo”. El cual da nombre a una ruta llamada de la misma forma.

La Ruta del Tempranillo

Esta ruta se complementa con una cadena de pueblos de la Andalucía donde el famoso bandolero vivió hasta su asesinato en 1833. Nació en el pueblo de Jauja, en la provincia de Córdoba. De allí tuvo que huir tras cometer un asesinato a muy temprana edad, algo que le valió para la creación de su mote. Mismo pueblo donde empezaremos nuestro camino.

Iremos recorriendo los pueblos tras los pasos del Tempranillo. Caminos que cuentan historias de terror, dramas pero también mucha fuerza por conseguir un fin, que era por lo que los bandoleros lucharían contra el nuevo gobierno impuesto por Napoleón en nuestro país.

Caminos de la Andalucía más íntima

Nos adentramos con esta aventura al interior de Andalucía. Un lugar bello y muy mágico donde podemos disfrutar de sus típicos pueblos con casas blancas, plazas e iglesias que guardan los recuerdos de un tiempo muy revuelto pero casi romántico del bandolerismo en la España en el s. XIX.

Esta ruta atraviesa los pueblos de Jauja, Alameda, Casariche, Benamejí, Palencia, Badolatosa y Corcoya. Puedes realizar la ruta desde el punto que desees, pero se recomienda trazarla entera.

Algo que no podéis dejar de visitar es el Salvoconducto. Que es una credencial donde coleccionar los sellos que acreditan los diferentes puntos de la ruta. Al igual modo que se hacía en la Edad Media para poder acceder a un viaje libre y seguro.

Acércate a la vida de un bandolero

Para vivir mejor esta experiencia de revivir la historia de un bandolero, se recomienda comprar una entrada (puedes encontrarla en los diferentes pueblos anteriores), la cual te dará derecho a poder entrar a los diferentes centros y museos que te acercaran más a la figura del Tempranillo y sus compañeros. Al precio casi simbólico de 7€, pudiendo visitar:

Centro temático del Bandolerismo Romántico

Centro temático del Campo Andaluz

Centro temático de las Termas Romanas

Centro temático del Río Genil

Centro temático del Paisaje Natural

Centro temático de la Gastronomía, Fiestas y Costumbres Populares.

Ver junglas y casquetes polares a la vez

Vamos a ser sinceros: cuando nos  preguntaban, de pequeñitos, a qué queríamos dedicarnos cuando creciéramos, todos hemos dicho en una u otra ocasión que nos gustaría ser astronautas. Luego, la vida se ha encargado de que cada cual viviera o dejara de vivir ese sueño de formas diferentes. Ahora, podemos volver a soñar.

No es que me falten destinos de los que hablar sobre el planeta –creo que eso siempre voy a estar “sobrado”-, sino que no me portaría verlos todos a la vez, al menos en una ocasión en la vida. Es por eso que se me ha ocurrido informarme sobre los viajes turísticos al espacio. De acuerdo: están muy lejos del alcance de mi cuenta bancaria, pero también lo estaba, hace sólo diez años, un ordenador como el que estoy utilizando ahora mismo para escribir.

Earth

Lo primero que se necesita para un viaje suborbital, a cien kilómetros de altura, es un entrenamiento intensivo de dos días, incluido en el precio de la experiencia. No sólo es una fase imprescindible, sino que va a enriquecer enormemente la aventura.

Una experiencia enriquecedora

Durante la rutina, nos vamos a familiarizar con el programa de vuelo, los sistemas críticos de la nave, operaciones de vuelo, nos acostumbraremos a la gravedad de cero, las aceleraciones en vuelo y los procedimientos de seguridad en lo que a vuelos espaciales se refiere. Además, el día del lanzamiento nos acompañará una tripulación especializada hasta que abordemos la nave.

Los motores de la nave nos llevarán por encima de los límites habituales de vuelo, hasta alcanzar los cien kilómetros de altitud. Allí, experimentaremos cinco minutos de ingravidez y podremos contemplar la curvatura de la Tierra o la negrura del espacio exterior, para regresar de nuevo a la posición inicial y comenzar el descenso a la Tierra, donde recibiremos la condecoración y la documentación formal que acredita nuestro vuelo.

Caro e inolvidable

Space Adventures es la empresa encargada de llevarnos al espacio, en un vuelo que, aun sin abandonar la órbita terrestre, dejará una huella imborrable en nuestra memoria. El vehículo está diseñado para ascender, suspenderse y descender automáticamente, sin necesidad de piloto alguno.

El precio de la aventura es de 120.000 dólares –sobre 91.000 euros-. De acuerdo: no es una cantidad que todo el mundo pueda permitirse por dos noches de hotel, un entrenamiento y una misión espacial, pero sí que significa que el sueño infantil de convertirnos en astronautas está un poco menos lejos.

Tal vez, dentro de una o dos décadas…