En pleno mes de mayo, cuando el buen tiempo y el sol hacen acto de presencia en nuestros días y las temperaturas comienzan a subir de manera considerable, es cuando empezamos a tener consciencia de que nuestras vacaciones se acercan. Es ahora cuando empezamos a echar mano de calculadoras, de sumas y restas infinitas para cuadrar nuestras cuentas con el fin de que consigamos al final un dinero que nos permita hacer alguna escapada durante nuestras vacaciones.
Pero como casi siempre, el dinero es lo de menos ya que podemos hacer escapadas gastando muy poquitos ahorros. Una de las mejores opciones para hacer una escapada low cost es escaparnos a cualquiera de las playas españolas con una tienda de campaña para hacer una acampada en algunos de los múltiples campings de nuestra geografía.
La costa andaluza, uno de los grandes destinos de acampadas
Aunque ya tengamos decidido que nuestra próxima escapada será una acampada en la playa, ahora debemos pensar en cuál de todas las playas españolas vamos a pasar nuestros días de descanso. Uno de los grandes destinos es Andalucía, que cuenta con playas de diversos tipos y características y que están bañadas por mares diferentes en cada uno de sus extremos, el Mediterráneo y el Atlántico.
Esto hace que Andalucía sea especial ya que al contar con costas en dos mares diferentes podemos disfrutar de múltiples paisajes únicos desde nuestro lugar de acampada, además de disfrutar de grandes actividades y aventuras en la playa.
Si buscamos disfrutar de actividades y deportes como el surf, la mejor opción es poner nuestra tienda de campaña en cualquiera de los campings de la costa gaditana, bañada en su mayor parte por el Atlántico. Este hecho, junto al viento que sopla en esta zona, hace que esta costa sea un lugar idóneo para practicar deportes como el surf.
Pero el surf no es lo único que podemos hacer durante nuestra acampada en las costas andaluzas. Si lo que buscamos es una escapada de descanso y relax estamos en el sitio perfecto ya que provincias como Almería cuenta con grandes playas y algunas calas casi vírgenes en las que nadie molestará nuestro descanso.
Y por si eso fuera poco, también podemos disfrutar de la gastronomía y de las fiestas de cada una de las ciudades aprovechando la llegada del verano y la organización de actividades casi todos los días.
Folligrafyco