Barcelona es una de las ciudades que reciben más turistas a lo largo del año en el mundo, por eso sus habitantes buscan cada vez más escapar los fines de semana de ella y de su masificado turismo.
En sus alrededores podemos encontrar pequeños pueblos con una gran belleza tanto por su arquitectura como por su naturaleza y gastronomía.
Cuevas de Can Riera
Las cuevas de Can Riera son unos de los secretos que se encuentran a escasos kilómetros de la capital catalana. En la localidad de Torrelles de Llobregat podremos sentir la sensación de estar viendo lo más similar al Antelope Canyon, en el Colorado.
Su rojiza piedra arcillosa y su espectacularidad hacen que estas tres cuevas sean una de las escapadas más accesibles para la mayoría de barceloneses, ya que no necesitarán gran cantidad de tiempo para acceder a ellas.
Montserrat
Otra de las grandes atracciones para poder pasar un buen día cerca de la ciudad es ir a visitar Montserrat.
Los más atrevidos podrán hacer diversas rutas caminando para poder llegar hasta el monasterio, monumento por excelencia de Montserrat. Ahora bien, si prefieres disfrutar de las vistas sin tener que estar caminando durante varias horas, el cremallera te permitirá llegar a ella por un precio muy económico. Por esa razón, si quieres disfrutar de las visitas al monasterio, al museo de Montserrat y a la Santa Cueva de Montserrat, entre otros, esta es tu escapada ideal.
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Sitges
Uno de los pueblos costeros más bonitos cercanos a Barcelona es Sitges. Su paseo marítimo, la Iglesia de San Bartolomé y Santa Tecla, su playa y su gastronomía hacen de este lugar uno de los pueblos más visitados por los habitantes de Barcelona.
Además, su proximidad y la facilidad de llegar a él con el tren hacen de Sitges el lugar perfecto para ir un fin de semana para escapar de la gran ciudad.
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Rupit y Pruit
Si prefieres pueblos de interior antes que los costaneros, Rupit debe de ser tu elección.
El pueblo, situado en la comarca de Osona, tiene el encanto de un lugar antiguo y poco explotado.
El puente colgado de cuerdas, la Iglesia de San Miquel y la calle del Fossar son los mayores atracciones de este lugar.
Además, en sus alrededores encontrarás otros preciosos pueblos con un encanto similar, como puede ser Pruit, ya que se ambos se encuentran a escasos 4 kilómetros de distancia.
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Cadaqués
A escasas 2 horas de la ciudad condal encontramos el que es considerado el pueblo más bonito de Cataluña, Cadaqués.
La que fue por muchos años tierra la Dalí, está situada en la península del Cabo de Creus, al noreste de Cataluña.
En este bonito pueblo pescador tendrás la oportunidad de perderte por sus calles y su paseo marítimo, visitar su muralla y ver la Iglesia de Santa María de Cadaqués, además de disfrutar de una gran gastronomía.
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Estas son algunas de las escapadas que puedes hacer para huir un día de Barcelona, alternando pueblos costeros o pequeños tesoros que podrás encontrar en el interior de Cataluña.