Cómo cada agosto Málaga se viste de verde y morado, sus colores de gala, para recibir a todos aquellos visitantes en su feria principal. La feria de Málaga, que como dicen ellos, no hay otra igual en el país. Este año quedará inaugurada el 17 de agosto hasta el día 24 del mismo mes.
Inicios de la Feria
La feria de Málaga se remonta a más de 500 años, y tiene su origen en las celebraciones por la reconquista de la ciudad por parte de los Reyes Católicos el 19 de agosto de 1487, y más recientemente se convirtieron en fiestas populares en el IV centenario de la reconquista en el año 1887, a partir de entonces se han ido festejando año tras año, coincidiendo con la llegada de turistas que quieren disfrutan de unas merecidas vacaciones en la Costa del Sol, lo que ha logrado que las fiestas se “popularicen” y lleguen a ser conocidas internacionalmente.
Disfrutando de la Feria
Popularmente la feria de Málaga se divide en dos: La feria de día y la feria de noche. La feria de día ha ido cambiando su ubicación a lo largo de los años, situándose en el centro histórico, en donde las calles se decoran de farolillos, hay música en vivo, los malagueños lucen sus mejores galas, los bares se abren a la calle para ofrecer comida y bebida a lo largo de todo el día; también se pueden disfrutar de las casas de hermandades que abren a los turistas y residentes para ofrecer algo de abrigo al sol de agosto, y poder disfrutar así de imágenes de la Semana Santa, acompañándola de vino dulce y pescaíto.
La feria de noche, se sitúa en el llamado Real, fuera de la ciudad, en donde las casetas de atracciones, casetas de comida y bebida tanto públicas como privadas, se entremezclan con el albero del suelo y los trajes de flamenca. El no ser una feria de casetas cerradas como puede ser Sevilla, facilita la integración del turista con la población local, en lo que se convierte en una fiesta de música y diversión que puede durar hasta que el día despunta.
No sólo de feria vive el hombre
Durante la feria de agosto, todas las tardes en la plaza de toros de la capital malacitana, la Malagueta, hay una cita diaria para los amantes de los capotes y el toreo. Mientras que por la mañana se celebran exposiciones, concursos de fotografía y en las calles hay espacios para que los niños también disfruten. Por la noche los restaurantes y bares tienen las puertas abiertas para ofrecer lo mejor de la gastronomía malagueña, regado con vino dulce como pajarete o cartojal; Y no nos podemos olvidar que durante 24h las playas de Málaga están abiertas al público que quiera visitarlas.