Betanzos, la capital del gótico gallego

Betanzos es una ciudad de la provincia de La Coruñaque llevó a ser provincia independiente durante el reinado de los Reyes Católicos. Con una situación muy estratégica, a día de hoy sigue siendo un importante punto dónde se dan cita industrias del transporte y de la alimentación.

Pero lo realmente sorprendente y bonito de esta ciudad cuya historia se remonta a antes del imperio romano, es su casco histórico, uno de los mejor conservados de Galicia y muy rico en edificios de gran importancia arquitectónica.

Visitar Betanzos es sumergirse en lo que parece una ciudad del medievo, con su abundancia de piedra y sus calles estrechas. Forma parte del camino inglés de Santiago y es un lugar muy visitado, sobre todo durante el verano, por turistas de todas partes.

Edificios de gran belleza

Sus edificios más representativos son sin duda sus iglesias, de los siglos XIV y XV, en su mayor parte de estilo gótico: Santa María del Azogue,la Iglesia de San Francisco ola Iglesia de Santiago, son las más importantes de ese estilo. También tenemosla Iglesia de Santo Domingo, que posee una gran torre barroca. Desde la misma se suelta todos los años, el 16 de agosto, un enorme globo en honor de San Roque, el patrón de la ciudad.

La fiesta del globo de Betanzos reúne a miles de visitantes todos los años y es su fiesta más emblemática junto con “Os Caneiros” una romería cuya particularidad es que la forma tradicional de acudir a los campos conocidos como “Os Caneiros” es en barcas engalanadas para la ocasión.

Aunque participa gente de todas las edades, son los jóvenes los que prolongan esta romería hasta altas horas de la madrugada, disfrutando de la comida y la bebida en pleno campo. Se celebran en el mes de agosto y acude gente de toda Galicia llamada por la vistosidad de los barcos y el buen ambiente de la fiesta.

Una rica gastronomía

Otro de los motivos para acudir a Betanzos es degustar unos vinos y unas tapas en las terrazas que hay en la plaza principal. Es muy famosa la tortilla de Betanzos, que presume de ser de las mejores de España. El pulpo, las truchas y los mariscos están presentes en todas las cartas. También es una zona de vinos, con su propia denominación de origen y que produce tanto tinto como blanco.

Para completar el menú y si queda sitio, podemos disfrutar de una bolla de nata típica de la zona.

Zaragoza, una ciudad con historia (II)

El otro día hablábamos, sobre todo, de dos de los edificios más significativos de Zaragoza: el Pilar y la Seo. Hoy vamos a ver un poco el pasado romano y musulmán que tiene la ciudad y que ha dejado una huella profunda en su carácter y en su historia.

Antes de la llegada de los romanos a la península, los territorios que conforman la ciudad ya estaban habitados desde el siglo VII a. C. por pueblos de la Edad del Bronce, también los íberos fundaron su ciudad sobre estas tierras y la llamaron Salduie.

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Santiago de Compostela: camino, raíces y piedra I

Como muchos pueblos españoles, en la historia de Santiago de Compostela hay un periodo de dominación romana puesto que en el territorio en el que ahora se erige la Catedral se encontraba un poblado romano desde el siglo I al siglo V. Desapareció el poblado pero no la necrópolis que se utilizó como cantera hasta el siglo VII. Continuar leyendo «Santiago de Compostela: camino, raíces y piedra I»

Lugares con nombres que evocan leyendas

Existen pueblos y lugares en España cuyos nombres hacen volar la imaginación con tan solo escucharlos. Nombres que nos hacen pensar en cual sería el origen y quién y por qué habrá bautizado de esa forma a una población en concreto.

Esto son dos lugares que me han llamado la atención y la leyenda que esconden. En la mayoría de los casos historia e imaginación se cruzan y es difícil saber qué parte hay de verdad y qué parte corresponde a cuentos que se han ido transmitiendo, pero ¿a quién le importa la realidad cuándo hay una bonita leyenda?

Aldea del Rey Niño

Está situada en la provincia de Ávila y su origen se remonta a la época de los romanos. Cuenta la leyenda que en el siglo XI,  Doña Urraca, viuda y madre de un hijo, sube al trono de León tras la muerte de su hermano. Convertida en heredera es obligada a contraer matrimonio nuevamente. Pero pronto descubre que su nuevo esposo quiere matar a su hijo para hacerse con el trono. Un grupo de nobles que conocían los planes del noble, se llevan al joven Alfonso y lo van escondiendo por diversos lugares para evitar que sea asesinado.

Uno de estos sitios resulta ser el Palacio de la Serna, a un kilómetro de esta aldea. Se dice que el joven rey paseaba por el pueblo como un aldeano más para evitar ser reconocido. Finalmente el joven se salvaría y subiría al trono como Fernando VII de León.

Cerro de La Encantada en Santa Cruz de la Zarza (Toledo)

La leyenda de La Encantada se repite en múltiples lugares de España y podemos encontrar muchos sitios que hacen referencia a esta historia. En cada zona se cuenta de diferentes formas, pero la base siempre es la misma. Incluso en los lugares dónde han estado los árabes, existe la leyenda de La Mora Encantada, que es una versión adaptada de la anterior.

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Todas las leyendas de La Encantada hablan sobre una mujer que se aparece la noche de San Juan y que peina sus cabellos mientras se refleja en un espejo. En este caso una de las más populares en Santa Cruz, pues existen varias versiones, habla de Juliana, la hija de un noble que se iba a desposar. En la víspera de San Juan esperaba impaciente a su amado temiendo que le hubiera pasado algo debido al mal tiempo, cuándo una gitana con un bebé en sus brazos llamó a la puerta para pedir que le dejaran refugiarse.

La mujer, enfadada y nerviosa por no saber de su prometido, no le permite entrar y la echa con malos modos, por lo que ella la maldice diciendo que el castillo será destruido y ella desaparecerá durante todo el año, pudiendo tan solo mostrarse la víspera de San Juan.

El mal tiempo se transforma en tormenta y un rayo destruye el castillo. El caballo del hombre al que esperaba aparece solo y pronto descubren que ha muerto despeñado. Juliana se vuelve loca tras eso y se cuenta que su imagen sigue apareciendo, esperando ver llegar a su enamorado todas las vísperas de San Juan, en el mismo cerro dónde se levantó un día su castillo.

Pueblos con leyendas (III): Lugares ¿imaginarios?

No podía faltar en esta breve relación de lugares mágicos referencia a sitios que quizás jamás han existido, o quizás se han borrado con el paso del tiempo, pero que continúan vivos en las leyendas populares y en la imaginación de la gente. ¿Sospechabais que en España tenemos nuestra particular Atlántida?

La octava isla Canaria: San Borondón

Es probable que si no eres canario o muy aficionado a las leyendas no hayas oído hablar jamás de esta isla. La leyenda la sitúa al oeste de Palma y durante mucho tiempo su existencia era tan incuestionable que cuándo España y Portugal se repartieron las tierras del Atlántico, fue incluida en la relación como isla propiedad de España.

Hay muchas versiones de quién la descubrió en origen, pero quizás la más difundida sea una leyenda irlandesa sobre un monje, San Brendan, que durante un viaje por  la zona de las Canarias llegó a una isla llena de vegetación y grandes árboles. Desembarcaron y celebraron una misa cuándo de repente la tierra comenzó a desplazarse. Asustados volvieron a la barca y comprobaron que no era tierra, sino un gigantesco animal marino.

Por este motivo se le conoce también como la isla ballena. De San Brendan procedería su nombre San Borondón, por una degeneración del mismo.

Se cuenta que muchos marineros y pescadores la han visto y cuándo se acercan, la isla se cubre de una densa niebla y desaparece ante sus asustados ojos, no quedando rastro alguno de la misma cuándo se disipan las nubes.

La laguna de Vacaras

No se sabe si esta laguna puede ser alguna de las que realmente existen en Sierra Nevada, cerca del pico Veleta. Las referencias de la leyenda son vagas y no se sabe si la laguna pudo haber desaparecido o actualmente haber cambiado la forma. Sea como sea, ahí está la leyenda.

Y se dice que un pastor que estaba con el rebaño caminaba hacia las orillas de la laguna cuándo de repente escuchó voces y se escondió. Dos hombres con vestimentas de alta alcurnia discutían al borde del agua y lanzaban las redes a sus aguas. De cada vez que arrojaban la red, esta volvía con un caballo en su interior. Pero en los dos primeros casos no parecía satisfacer a los misteriosos personajes.

Finalmente un caballo blanco y hermoso salió de las aguas atrapado en la red. Tras susurrarle al oído unas palabras que la bestia pareció entender, subieron sobre el y éste comenzó a ascender al cielo sin parecer notar la carga de ambos. Muchos intentaron pescar caballos en sus aguas, más no volvieron a lograrlo.

Baiona: un paraíso dentro del paraíso

Enclavado en las Rías Baixas gallegas, a apenas unos kilómetros de Vigo y a unos pocos –en otra dirección- de Portugal, Baiona tiene el privilegio de ser una villa donde se siguen ciertas tradiciones pesqueras, a la vez que se puede disfrutar de un ambiente de fiesta espectacular en un lugar dentro de cuyas calles puede todavía respirarse cierto aire medieval.

Vayamos por partes: quienes no sepan qué son o dónde están las Rías Baixas, han de localizarlas al Noroeste de España y suroeste de Galicia ¿Ya? Pues deje de mirar el mapa y póngase en camino, que los paisajes, gentes, gastronomía y variedad de actividades de la zona son maravillosos.

Baiona

Un pueblo pesquero, turístico e histórico

Una vez que sabemos dónde estamos, adentrémonos en lo que es –más bien era, con excepciones- un pueblo pesquero, de lo que dejan constancia un muelle donde siempre se encuentra algún pescador de caña a la buscas de “luras” (calamares); y una lonja que aún funciona, tanto para Baiona como para los pueblos limítrofes.

Es un lugar con Historia –sí: con mayúsculas-, como lo demuestra el antiguo castillo, convertido ahora en parte de la red de Paradores de España y, sobre todo uno de los más importantes reclamos turísticos, no ya de la población, sino de todo el entorno: la réplica de la Pinta, una de las tres carabelas con las que Colón llegó a a India y que arribaba de vuelta a la bahía de Baiona a finales del Siglo XV.

Fiesta y belleza

Hablábamos también de un lugar de ambiente inigualable, algo de lo que saben mucho los hosteleros de la zona, que ven cómo se llenan sus locales, sobre todo en verano, con turistas de todas las regiones y nacionalidades. En ese aspecto, es, también una zona de esparcimiento de muchos jóvenes de la vecina Vigo.

Hablando de hostelería, el buen manjar gallego es proverbial: mariscos, pescados y, en menor –poco menor- medida, carnes se alían para que los paladares disfruten de unos días de fiesta. La variedad de restaurantes, tantos en tipos como en calidades y precios es también grande.

Una Baiona para cada uno

Y finalizaremos –antes o después había que hacerlo- con las muchas actividades que se celebran o tienen su origen en Baiona, como las visitas al parque natural de las islas Cíes o la posibilidad de navegar hasta una batea, saber cómo se cultivan y tratan los mejillones y, a la vuelta, disfrutar de un plato de tal molusco acompañado de vino de la zona.

No cerramos el capítulo de actividades del mismo modo que no cerramos el de atractivos de la zona, ya que en Baiona, en las Rías Baixas, en Galicia… cada cual es muy capaz de averiguar qué y cuándo le apetece hacer.